Ética de Cartón Piedra
El Instituto Ethisphere es una organización estadounidense que premia a las empresas «más éticas» del mundo. Una institución «con ánimo de lucro» que concede la certificación «Ethisphere Ethics Inside». A este galardón se llega una vez que las documentaciones y encuestas proporcionadas por las empresas generan un determinado valor en el «cociente ético verificado», el algoritmo que utilizan y que las hace dignas de tal mención.
La sorpresa está cuando nos encontramos que, en la lista de empresas «premiadas» con tal distintivo, podemos encontrarnos con entidades tales como «Elbit Systems of America». Hablamos de una empresa que mucho tiene que ver con las matanzas que se están produciendo en Gaza ya que es una subsidiaria de la principal empresa de armas de Israel, «Elbit Systems», fabricante del «Iron Sting» y de aviones no tripulados.
El «Iron Sting» (Aguijón de Acero) es, en palabras del ministro de Defensa de Israel, Benny Gantz, el arma que «revolucionará la guerra terrestre y equipará a los batallones con potencia de fuego orgánica, precisa y eficaz». El «Iron Sting» se ha utilizado por primera vez en Gaza por parte del ejército israelí y es una bomba de mortero de alta precisión que emplea un láser y un sistema GPS para alcanzar su objetivo.
Hablamos de «Elbit Systems», pero no es la única empresa de armamento que podemos encontrar en el grupo de empresas «más éticas». Un distintivo por el que las empresas que pretenden obtenerlo pagan, y no poco, por alcanzarlo. Eso sí, tienen garantizado el silencio absoluto caso de no conseguirlo.
Pues bien, preguntada la presidenta ejecutiva de Ethisphere sobre la cuestión de cómo empresas fabricantes de armamento, o que incumplen sus deberes fiscales, o que falsean datos, alcanzan tal certificación, vino a decir que lo importante para obtener dicho distintivo es que las empresas tengan «una buena cultura del trabajo».
No puedo menos que compartir el criterio de Mark Lance, profesor de filosofía en la Universidad de Georgetown quien afirmaba, refiriéndose a esta concesión del distintivo a «Elbit Systems», que «calificar a una empresa de ‘moral’ cuando está violando directamente el llamamiento al boicot del pueblo palestino de la manera más directa posible suministrando equipo militar a las Fuerzas de Defensa de Israel es burlarse de la noción misma de moralidad o ética».
Al ver en una empresa el distintivo de World’s Most Ethical Companies debiéramos suponer que una buena «cultura del trabajo» implicaría un comportamiento íntegro, protección del medio ambiente, atención a los consumidores, trato justo a sus trabajadores, respeto a los Derechos Humanos, …, pero está claro que esto no es así. Parece que basta con una Ética de Cartón Piedra.